Tengo que reconocer que en esta tarta quise probar algo diferente, y así me pasó, que por no hacer antes pruebas, no me quedó como tenía pensado en mi mente.
En esta ocasión, a Oliver le encantan los dinosaurios, y el tema iría de eso, como no! jajaja.
Y pensé... molaría hacer una valla alrededor de la tarta.... pero no quería hacerla de fondant, ya que el chocolate se parecería mas a la madera. Pues la solución está en hacerlo con chocolate plástico!!!!
Total, que me puse manos a la obra. No se tarda nada en hacerlo, cogí chocolate de cobertura Valor, y sirope de maíz. Lo hice y dejé reposar.
Otro día hice las maderitas para la tarta, y de nuevo a la nevera.
El día que tenía que terminar la tarta lo coloque sobre el fondant, no me hizo falta pegarlo con agua ni pegamento comestible, ya sólo con el calor de las manos se pegaba solo.
También hizo un nido para colocar un huevo de dinosaurio, y fue con el mismo chocolate.
Todo iba bien hasta que me puse con los troncos de la palmeras.... yo quería hacer una palmeras chulas, altas y curvadas.... y que conseguí? jajaja pues unos arbustos!!!!
El problema estaba en que hacía ya bastante calor, y mis troncos de palmeras eran de chocolate... os imagináis el resto no? el tronco decidió no sujetarse, y curvarse por el calor. Total, que se derretía por momentos!!!!! desesperante.
Al final quedaron unos arbustos, no era mi idea, pero no podía hacer mucho mas....
A Oliver le gustó mucho la tarta, creo que flipó, y hasta le pegó un bocao a la cabeza de un dinosaurio.
La tarta era de chocolate rellena de crema de oreo, y creo que estaba muy buena...
Jejejeje, me alegro que les gustase.
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